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Bruselas y su tradición amarilla

Bandera belgica flameando

Después de pasar unos días en Bruselas, podemos afirmar que estuvimos en la tierra de la cerveza. Más allá de sus hermosas edificaciones y de sus grandes y bellos parques, plazas y espacios verdes, la capital belga se destaca por su enorme elaboración de cerveza.


Bruselas es la capital de Bélgica​ y la principal sede administrativa de la Unión Europea (UE). Además, es la sede del gobierno y el Parlamento. Alberga, por otro lado, el Castillo de Laeken, la residencia del rey Felipe de Bélgica y la familia real belga.


Más allá de esto, la ciudad se caracteriza por otra cosa totalmente diferente. Y es que dispone de la mayor variedad de cerveza en el mundo con más de 400. En todo el país hay mas de 1200 marcas de cervezas originales. Una verdadera locura!

 

Por este motivo, Bélgica es considerado como el país con más tradición cervecera del mundo. Los belgas tienen un consumo medio de más de 100 litros al año. Pero esto no es algo actual, ya en el Siglo XII se elaboraba cerveza en Bélgica -incluso antes de ser un país independiente-, y a partir del Siglo XIV existen gremios de cerveceros en las principales ciudades del país. 

 

A partir de esto, el consumo de cerveza en Bélgica se fue convirtiendo en un acto tradicional que debe cumplir con ciertos requisitos. Por ejemplo, para cada tipo de cerveza existe una copa diferente. Los bares belgas, poseen normalmente más de 300 tipos distintos de copas para cerveza, una para cada una de las variedades.

Esto comenzó, según cuentan los lugareños, con el objetivo de potenciar el sabor, aroma y color de la bebida.      

Sabiendo esto, no nos llamó para nada la atención cuando vimos los precios de gran parte de las cervezas belgas. En un supermercado, por ejemplo, se puede conseguir una lata o una botella de 33 o 50 cl a menos de 0,40 centavos de euro. Increíble. Por otro lado, en un bar tradicional en pleno centro de Bruselas, puedes tomar una pinta a tan sólo un euro.    

   

Para concluir, nos parece bien comentar brevemente los tres tipos de cerveza belgas, divididos según su método de fermentación:     

 

Cerveza de baja fermentación: es la más reciente. El proceso data de 1840 y produce un tipo de cerveza conocido como pils o lager. Corresponde al 90% de toda la producción mundial. La pils es una cerveza ligera, clara y de aspecto dorado.     

 

Cerveza de alta fermentación: es mucho más antigua y tradicional. Originalmente, este tipo de cerveza tenía la misma densidad y porcentaje de alcohol que la pils; ahora contiene más alcohol. Corresponden a este tipo las cervezas Amber y la “Special Belgian”, así como la cerveza blanca, las cervezas de abadía y las trapistas.     

   

Cerveza de fermentación espontánea: típico de la región de Bruselas, este proceso se utiliza para elaborar la Lambic. Esta variedad se produce mediante la fermentación espontánea de las levaduras encontradas específicamente en el valle del río Sena. 

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